domingo, 18 de enero de 2009

Síndrome de mí mismo

Como últimamente vivo fechas señeras para el formateo de muchos y muy variopintos recovecos de mi alma, se me ha ocurrido, así, a modo de ruidosa expiación, que hoy podría compartir con vosotros algunos de los recuerdos e imágenes más curiosos que guarda mi sufrido disco duro. No lo hago con la intención de que elucubréis un perfil psicológico de vuestro amigo Diógenes (aunque quizá concluyáis que padezco una suerte de síndrome de ídem informático), sino con la esperanza de que todos nos riamos un rato y, por supuesto, de que mis habituales (y los que no lo son tanto) se mojen confesando a su vez los oscuros secretos que guardan en sus a priori inocentes carpetuelas. Esperemos que el experimento guste; si es así, prometo segundas y hasta terceras partes. Ah, y recordad que sólo haciendo clic sobre las fotos pueden contemplarse en todo su esplendor. Vamos allá:

Esto es antológico. Mitomanía al cuadrado. Me encanta:



Las primeras letras de La Puta de Babilonia, de Fernando Vallejo, que tienen tela:



Perdonen si todavía me descojono con esto. Debe de ser que soy un mal tipo, o que se me ha escapado concienciarme de algo. ¿Necesito ayuda?





Notas parroquiales auténticas, para partirse la caja:



¿Necesita un abogado? No lo dude, éste es su hombre:



Mi Demotivator más bestia:



...Y de regalo, una toma falsa (lo que estábais esperando, vamos):

5 comentarios:

Puesfijate dijo...

Del síndrome de diógenes digital ya hablé en un post hace unos meses, tienes suerte si en tu caso se limita al ordenador, yo lo tengo extendido al resto de la casa.

Ah, y aunque no te lo creas me he leído entera la puta de Babilonia. Y me descojono también con "mi marido me pega". En realidad no somos tan distintos, quizá tú miras la realidad con cristales más oscuros y yo siento la absurda obligación de ser optimista. Sí, como algunos sienten la obligación de ser valientes u honestos. Es algo moral. Y al final, de fingirlo, lo acabas siendo.

Puesto a tirarnos flores diría que tú eres un Boyero de la vida y yo un aprendiz de Enric González... Bueno, puesto a tirarte flores te diré que tu blog me parece bastante mejor que lo que escribe Boyero, un tipo al que personalmente tengo mucho cariño pero profesionalmente considero sobrevaloradísimo.

...Y sobre la toma falsa ¿A quién se lo ocurre follar en una bañera sin quitarse los tacones?

Buenas noches

Paul dijo...

Puesfíjate: No recuerdo un post tuyo en estos términos, pero prometo buscarlo. Oye, yo no soy tan pesimista; si no me riera de mí mismo no habría quien me aguantara. Gracias por los elogios, aunque últimamente escribo lo primero que se me ocurre y creo que se nota.

¡No me digas que nunca has hecho lo que los mozos de la bañera!

Unknown dijo...

Ojito con meterse con los zapatos de la chati...que me gustan mucho...

Paul dijo...

Francisco: No así sus pies. Me sobra el medio segundo en que se ven para exigirle desde aquí una pedicura.

Sí, soy fetichista a tal extremo.

Unknown dijo...

lo he comprobado y no es procedente tu reclamación....